Las mejores piscinas naturales en España que debes visitar

España es un país privilegiado por su diversidad natural, ofreciendo a locales y turistas una gran cantidad de paisajes impresionantes para disfrutar. Entre sus maravillas, las piscinas naturales en España se han convertido en un atractivo especial para aquellos que buscan una alternativa refrescante y diferente a las playas tradicionales.

Estas formaciones de agua dulce, rodeadas de entornos naturales espectaculares, permiten un baño en un ambiente relajante y lejos del bullicio de las grandes ciudades.

Desde piscinas esculpidas en la roca por el paso del tiempo hasta lagunas de aguas cristalinas con cascadas, cada región de España ofrece espacios únicos para disfrutar del verano o simplemente para una escapada en cualquier época del año.

Descubrir estas joyas naturales es una excelente manera de conectar con la naturaleza y explorar rincones sorprendentes del país. Algunas de estas piscinas cuentan con zonas habilitadas para el baño y otras se encuentran en espacios protegidos, por lo que es fundamental informarse antes de visitarlas y respetar su entorno.

Las Chorreras del Cabriel, Cuenca

Ubicadas en Castilla-La Mancha, este conjunto de pozas, cascadas y saltos de agua forma una de las piscinas naturales en España más impresionantes. Sus aguas turquesas y su entorno rocoso crean un paisaje idílico para los amantes del senderismo y la aventura. El baño está permitido en ciertas zonas, siempre respetando el entorno para preservar su belleza natural.

Gulpiyuri, Asturias

Considerada una de las piscinas naturales más singulares del mundo, Gulpiyuri es una pequeña playa interior de agua salada que se encuentra en Asturias. Su ubicación entre prados y acantilados la hace parecer un oasis escondido. Aunque su tamaño es reducido, su encanto y la sensación de estar en un espacio casi secreto la convierten en un destino imperdible.

Charco Azul, El Hierro

En las Islas Canarias, este paraje de origen volcánico es una opción perfecta para quienes buscan tranquilidad y aguas cristalinas. Protegida del oleaje del Atlántico, esta piscina natural permite disfrutar de un baño seguro en un entorno de gran belleza. Sus formaciones de lava solidificada y el contraste con el azul profundo del agua hacen de este lugar un escenario inigualable.

Fuentes del Algar, Alicante

A tan solo 15 kilómetros de Benidorm, estas cascadas y piscinas naturales ofrecen una alternativa refrescante a las playas del Mediterráneo. Rodeadas de vegetación exuberante, las aguas frías de estas pozas son ideales para combatir el calor del verano. Además, hay senderos habilitados que permiten explorar mejor la zona y disfrutar de sus vistas panorámicas.

Poza de los Patos, Tenerife

Dentro del Barranco de Ruiz, en la isla de Tenerife, se encuentra esta piscina natural que combina la belleza de la montaña con la cercanía al mar. Sus aguas cristalinas y su ambiente tranquilo la convierten en un lugar ideal para una jornada de descanso. Se recomienda visitar en época de lluvias moderadas, cuando el caudal del agua crea una imagen aún más impresionante.

Piscinas Naturales de Arenas de San Pedro, Ávila

Estas piscinas de agua dulce, alimentadas por el río Arenal, son un destino perfecto para quienes buscan un baño relajante en un ambiente natural. La temperatura del agua suele ser fresca, lo que las hace ideales para los días calurosos de verano. Además, están rodeadas de zonas de descanso y merenderos, lo que las convierte en una opción atractiva para toda la familia.

Pozo de los Humos, Salamanca

Ubicado en el Parque Natural de las Arribes del Duero, el Pozo de los Humos es un enclave natural donde el agua cae en forma de cascada y se acumula en una piscina de gran belleza. Su nombre se debe a la nube de vapor de agua que se forma cuando el caudal es alto, creando un efecto espectacular. Es una opción excelente para quienes disfrutan del turismo de naturaleza.

Lagos de Covadonga, Asturias

Si bien no son piscinas naturales en el sentido tradicional, estos lagos de origen glacial ofrecen una experiencia única para los amantes de la montaña. En ciertas épocas del año, es posible encontrar pequeñas pozas donde darse un baño rodeado de un paisaje impresionante. La belleza del entorno y la riqueza faunística de la zona hacen de este destino una parada obligatoria.

Charco del Tamaduste, El Hierro

Otra de las joyas de las Islas Canarias es este charco de aguas tranquilas y cristalinas, perfecto para nadar y relajarse. Su origen volcánico y su entorno rocoso crean un paisaje espectacular que merece ser explorado. Es un destino popular entre los residentes de la isla y ofrece un ambiente menos concurrido en comparación con otras piscinas naturales.

Las piscinas naturales en España representan una alternativa perfecta para quienes buscan escapar del turismo convencional y sumergirse en entornos naturales de gran belleza.