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Inversiones inteligentes: cómo empezar a invertir con tan solo 50 € al mes

Hace años que el mundo de las inversiones, las acciones y las ganancias dejaron de ser un terreno reservado exclusivamente a hombres vestidos de traje que se paseaban por las calles de Nueva York. Las inversiones han cambiado.

La llegada de Internet supuso una revolución. Ahora todo el mundo tiene acceso a las inversiones desde su casa, sin necesidad de tener una carrera ni conocimientos en concreto. Basta con tener el dinero necesario y buscar ayuda en Google.

Pero aunque cada vez hay más cryptobros, inversores amateur millonarios y gente experta en el sector, lo cierto es que dar el primer paso hacia el mundo de las inversiones no es particularmente sencillo. O al menos no lo parece.

Por eso estamos hoy aquí. Desde Moneyman hemos preparado una sencilla guía para que empieces a invertir de forma inteligente. Y lo hemos hecho partiendo de una premisa muy fácil: solo dispones de 50 € al mes. Muy al alcance de todo el mundo.

En este post te explicamos el paso a paso para dar el salto al mundo de la inversión. Recuerda que cada caso es particular y que este artículo no debe ser interpretado como asesoramiento personalizado. Se trata solo de una pequeña ayuda.

Si tienes 50 € en la cartera, ganas de sacarles el mayor provecho y te sientes con ganas de probar a invertir: ¡sigue leyendo!

1- Establece tus objetivos

Empecemos por el principio: ¿qué quieres conseguir con tu inversión? ¿Necesitas dinero para algo inminente o tu presupuesto es un dinero extra que no necesitas en los próximos meses? Dependiendo de tu situación, el plan puede ser muy diferente.

Normalmente se diferencian dos tipos de inversión: las de corto plazo y las de largo plazo. Las primeras buscan obtener unos beneficios en poco tiempo para poder emplear esas ganancias en una necesidad relativamente inminente. Los segundos, cuentan con más tiempo.

Es de vital importancia definir claramente cuál es tu objetivo para poder diseñar un horizonte de inversión claro: una guía que te ayude a no salirte del plan establecido en ningún momento.

2- Conoce tu tolerancia al riesgo

Hay gente más atrevida y gente más conservadora. También en el mundo de las inversiones. Algunos prefieren saber que sus ganancias serán menores pero que su dinero corre menos riesgos, mientras que otros están dispuestos a jugársela.

La tolerancia al riesgo es un indicador para entender cómo de dispuesto estás a que tu inversión sufra altibajos a cambio de una mayor rentabilidad. Algo así como un test de una revista para saber si te van los riesgos.

Antes de empezar a invertir es importante que te conozcas. Jugar con tu dinero de una forma que no resulte cómoda para tu personalidad puede tener efectos negativos y convertir el mundo de las inversiones en una pesadilla para ti.

En esta página de Rutgers encontrarás varios tests en inglés para evaluar tu perfil como inversionista.

3- Infórmate de los conceptos básicos

Toca hincar los codos. O lo que es lo mismo: ponerse al día en el vocabulario de las inversiones y todos los conceptos nuevos a los que tendrás que enfrentarte. Créenos: no son pocos.

Aunque gracias a la democratización del mundo de inversiones cada vez encontrarás más recursos que te expliquen qué es cada cosa, desde Moneyman te recomendamos que reserves parte de tu tiempo para empaparte de la terminología inversionista.

Y esto no va de abrir una enciclopedia o leerse artículos técnicos interminables. Gracias a las redes sociales, aprender de finanzas puede ser muy divertido. Basta con que te des una vuelta por YouTube, Instagram o TikTok para aprender.

Busca canales y fuentes de información que utilicen un lenguaje cercano para ti, que te pongan ejemplos que te hagan sentido y que aclaren absolutamente todas tus dudas. En el mundo de la inversión lo peor que puedes hacer es firmar algo sin entenderlo.

4- Crea un presupuesto para ahorrar

Aunque en este ejemplo solo estamos planteando el uso de 50 € al mes, uno de los pasos más importantes en el mundo de la inversión es el ahorro. O mejor dicho: el asegurarse de que dispones del dinero para la inversión.

Si estás dando los primeros pasos en esto de la inversión, te recomendamos que montes un plan paralelo para asegurar tus ingresos para tus inversiones. Si tus objetivos son a largo plazo y tienes un plan ya armado, debes asegurar poder llevarlo a cabo.

La planificación y un buen presupuesto son claves en el mundo de la inversión. A pesar de que lo que vemos en las películas parece algo impulsivo y repentino (¡Compro!), lo que hay detrás de cada decisión son meses y meses de ahorro y organización minuciosa.

5- Explora opciones y diversifica

El mundo de la inversión va mucho más allá de la bolsa y las acciones. Te sorprenderá saber que si decides lanzarte a la inversión se abre sobre ti un amplio abanico de opciones con diferentes riesgos y potenciales.

Dependiendo de tus objetivos y tu tolerancia al riesgo encontrarás opciones de los más variadas que se adaptarán mejor o peor a tus necesidades y prioridades. Y es que no es lo mismo contratar un plan de pensiones que invertir en bolsa.

Independientemente de cuáles sean tus objetivos, una cosa está clara: si tienes la oportunidad, diversificar las opciones es una apuesta recomendable. Si repartes tu inversión entre diferentes productos con características completamente diferentes, reducirás el riesgo de perderlo todo a una.

6- Encuentra opciones que te lo pongan fácil

Aunque pueda parecer que no, cada vez son más los bancos y las instituciones financieras que ofrecen y facilitan la inversión entre todas las personas. Tengan el presupuesto que tengan. Y si estás interesado, tienes que saber aprovecharlo.

Buscar cuentas de inversión que te permitan manejar tus inversiones desde un único lugar y que te faciliten la obtención de beneficios es clave para invertir con tranquilidad. De hecho, cada vez más bancos te ofrecen una sola cuenta desde la que “jugar” con tu dinero.

Las inversiones son productos muy atractivos para los bancos porque pueden disponer de ese dinero con mayor facilidad que con otros productos más conservadores (cuentas corrientes, por ejemplo). Y por eso, te lo van a poner fácil.

La clave, como en todo lo relacionado con las finanzas, es comparar bien y escuchar diferentes opciones y ofertas. Asegúrate de considerar todo el abanico de opciones y encontrar la más beneficiosa para tu situación.

7- Recuerda: estás en un proceso de aprendizaje

Nadie nació aprendido. El mundo de las inversiones es nuevo para muchos de nosotros. La falta de educación financiera en nuestro sistema hace que no tengamos las herramientas necesarias para enfrentarnos con seguridad a esto. Y es completamente normal.

Nunca te olvides de que te encuentras en un proceso de aprendizaje que no acaba nunca. Siempre habrá productos nuevos, opciones diferentes y algo que no conocías hasta este momento. Date tiempo, tómatelo con calma y avanza paso a paso.

Desde Moneyman te recomendamos que empieces por lo sencillo, por lugares comunes en los que te puedas mover con comodidad. Y a medida que avances y ganes seguridad en tus finanzas, empieces a arriesgar e innovar un poco más. Según lo que te pida el cuerpo.

Las inversiones tienen un significado completamente diferente para cada persona y lo que es un éxito rotundo para ti, puede ser un fracaso total para otro. Lo importante es que tengas un buen plan con objetivos. Y que lo sigas al pie de la letra.