Las tarjetas de crédito hace muchos años que existen y con el paso del tiempo han alcanzado una implantación muy amplia entre la población y han sustituido al dinero en efectivo en una gran cantidad de transacciones comerciales, excepto para aquellas de importes mínimos.
Pero estas tarjetas de crédito no son sólo un medio de pago, sino también una forma de obtener financiación de pequeños importes. Sin embargo, en la actualidad está emergiendo una nueva forma de conseguir dinero. Estamos hablando de los préstamos online.
La irrupción de las nuevas tecnologías, la banca por Internet y las fintech hace posible que podamos conseguir financiación a través de internet o de una aplicación móvil. Esta forma rápida de obtener dinero a préstamo presenta ventajas con respecto a las tarjetas de crédito. A continuación os exponemos los 5 beneficios del préstamo online en comparación con las tarjetas de crédito.
1. Permiten conseguir mayores cantidades de dinero
Las tarjetas de crédito están limitadas a cantidades pequeñas de dinero. Salvo determinadas excepciones de personas muy pudientes, lo normal es que estén limitadas a 3.000 euros como mucho.
Por el contrario, con un préstamo online se puede acceder a mayores cantidades de dinero online. Por ejemplo, se pueden pedir préstamos al consumo para pagar una boda, para comprar un coche o para pagar una factura del dentista.
2. Disponibles casi al instante
Las tarjetas de crédito no están disponibles al momento, tardan unos días en llegarnos al domicilio y mientras tanto, por razones de seguridad, no es posible utilizarlas. Por su parte, el préstamo online, una vez aprobada la solicitud, el dinero estará disponible en la cuenta en muy poco tiempo.
El proceso de solicitud suele ser muy sencillo, cómodo y rápido. Podemos hacerlo cómodamente desde nuestro ordenador o desde el teléfono móvil a través de webs o apps que son muy intuitivas. No nos llevará mucho tiempo realizar la solicitud y la respuesta será muy ágil. Es posible tener el dinero en menos de 24 horas.
3. Intereses más económicos
Una de las cosas fundamentales a las que hay que prestar atención a la hora de obtener una financiación, es el tipo de interés que nos van a aplicar. No nos da lo mismo pagar 2.500 euros por un capital principal de 2.000 euros, que pagar 2.800 por el mismo importe prestado.
Las tarjetas de crédito tienen unos intereses mucho más elevados. Es mucho mejor para el consumidor pedir un préstamo al consumo. Sus intereses suelen ser más reducidos que los de las tarjetas de crédito y además ello nos facilitará la devolución de la cantidad prestada al pagar menos intereses. Antes de pedir el préstamo online hay que revisar varias ofertas, comparar y hacer las cuentas para ver cuál nos da mejores condiciones de interés y facilidades de pago.
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4. Mejor control control del endeudamiento
La mayor parte de las tarjetas de crédito son de carácter revolvente o revolving. Esto significa que nos conceden un límite de crédito en la tarjeta. Al usar dicho límite se reduce el disponible pero cuando devolvemos lo utilizado vuelve a estar disponible la totalidad.
Es decir, podemos utilizar la tarjeta siempre que queramos, lo que puede hacernos perder la perspectiva de lo que estamos gastando. El excesivo uso de tarjetas es peligroso ya que puede crear situaciones de morosidad. El uso desmedido y los intereses elevados puede ser un cóctel explosivo puesto que puede llegar el momento en que no se pueda devolver el dinero en los plazos establecidos, generando intereses aún más elevados.
Esto no sucede con el préstamo online en el que obtenemos un dinero para un fin concreto y una vez utilizado no vuelve a estar disponible. Sería necesario pedir otro préstamo. De esta forma es más sencillo controlar el endeudamiento.
5. Mayor plazo para devolver el dinero
En los préstamos online hay más flexibilidad a la hora de elegir el plazo de devolución. Al poder obtener una cantidad de dinero superior a la que se obtiene mediante tarjeta de crédito, es posible aumentar el plazo de devolución e incluso obtener carencias, es decir, un periodo (normalmente al principio) en el que no se paga capital, sino solo intereses.
En el caso de las tarjetas esto queda más limitado ya que no hay carencias y el pago de los importes debidos no se puede aplazar mucho tiempo. Esto puede generar los problemas de morosidad que hemos explicado en el punto anterior.
Si no se alcanza la financiación suficiente para algo importante es posible obtener un préstamo online en forma de microcrédito. Moneyman es la mejor fintech en este sentido y nos permitirá obtener hasta 300 euros sin comisiones, en el sitio web o en la aplicación móvil de Moneyman. Sencillo, rápido y sin esperas. Moneyman es dinero al instante.
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